Durante estos días en Chad hemos podido ser testigos de la evolución de los proyectos que desde SED hemos apoyado durante todos estos años. Chad es uno de nuestros países referentes donde más trayectoria de trabajo y más fondos se han canalizado en toda la historia de la organización.
Durante todo este tiempo los proyectos realizados han ido encaminados a la promoción de derechos tan importantes como el derecho al acceso al agua potable, derecho a la promoción a la cultura, derecho a la alimentación, etc; pero si hay algo que caracteriza la labor de SED en general y en el país africano en particular, es la promoción del derecho a la educación.
En este ámbito ha sido fundamental contar con la gestión, apoyo e implicación de los Hermanos Maristas, presentes en el país desde el año 1993. La comunidad marista se ubica concretamente en la localidad de Koumrá, al sur del país. Gracias a su labor continuada y sostenida en el tiempo se han hecho grandes avances en el fortalecimiento del sector educativo en un país que se encuentra entre los 3 países (todos ellos africanos) con menor Índice de Desarrollo Humano y que presenta los siguientes datos en materia educativa.
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Durante este viaje hemos podido asistir también a un cambio en la comunidad de Hermanos Maristas. Después de 18 años al servicio de la población más desfavorecida de Koumrá, el Hermano Martín Sarobe pasaba el testigo a la joven comunidad de hermanos. Se trata de dos chadianos: SuccésNgardoum y FredericNadji y dos cameruneses: Stanislaus- Mary Nsotaka y BrendanGhakanyuy.
Desde aquí queremos agradecer al hermano Martín Sarobe todo el trabajo realizado durante estos casi 20 años y anunciar públicamente que SED seguirá apostando por apoyar y sostener los proyectos impulsados por la nueva comunidad de Chad.