La educación secundaria sigue siendo uno de los mayores desafíos pendientes en Tanzania, donde menos del 3% de la población culmina la educación secundaria y alcanza así la educación superior.
Para ayudar a cambiar esta situación, la comunidad marista de Mwanza ha decidido comenzar un internado de escuela secundaria donde además de proporcionar acceso a la educación, se podrá contar con los recursos necesarios para que los estudiantes desarrollen todas sus capacidades y, en el futuro, pueden ser agentes de transformación social en Tanzania.
La escuela intentará dar lugar a 450 adolescentes. Los principios pedagógicos bajo los que funcionará la comunidad educativa tendrán siempre un enfoque integral a la persona.